Carmen Landívar, docente de la Universidad de Piura, hace unas propuestas sobre los últimos resultados del examen de profesores.
Por Jaim Córdova. 22 enero, 2014.
Foto: diariocorreo.pe
Los resultados del último examen a los profesores ha permitido reconfirmar la crisis en el sector educativo: más del 80% de los profesores de educación inicial no alcanzaron la mínima nota aprobatoria obligando a las autoridades a contratar a docentes que no están calificados. ¿Qué se puede hacer para revertir esta situación? La experta en metodología y estrategias de enseñanza y aprendizaje de la Universidad de Piura, Carmen Landívar, hace algunas propuestas.
Los resultados de un examen en educación han vuelto a ser una noticia lamentable…
El éxito que tenga un país va a depender siempre de la educación; por ello, la preocupación de los gobernantes debe estar fijada siempre en ella.
¿Son los profesores los que no se preocupan por mejorar su labor?
Hay que entender que para ser profesor se necesita, en primer lugar, tener vocación de servicio. Muchas veces, el ser profesor se ve como última opción, porque representa un trabajo seguro o porque no se ingresa a otras carreras. Partiendo de esta idea, muchas de las personas que quieren ser profesores ven esta carrera como última opción cuando, en realidad, son los mejores los que deberían estudiar para ser docentes, porque se necesita tener muchas habilidades y vocación.
¿Qué está fallando en el sistema educativo?
En los centros de formación no hay un buen filtro para las personas que quieren formarse como profesores. Además, hay una oferta indiscriminada de centros de formación superior sin respaldo de la calidad educativa que brindan.
Las notas más bajas son los de Educación Inicial. ¿A qué se debe esto?
Porque no hay una verdadera cualificación de profesionales. Frente a los otros niveles de educación básica regular, la Educación Inicial es la que más se ha descuidado. Se piensa que por ser inicial se requiere lo mínimo, cuando en realidad es lo contrario, porque se necesita tener altas habilidades y competencias, ya que son docentes en la formación básica del desarrollo integral de los alumnos en todo el proceso escolar.
¿Cuáles son las consecuencias de estos resultados?
Ante la necesidad de cubrir las plazas, se tiene que contratar a profesores que no están verdaderamente cualificados para el ejercicio, perjudicando de esta manera a los escolares, porque tampoco se trata de dejar de atenderlos.
¿Qué acciones se deben tomar para revertir esta situación?
Preparar a los profesores en su labor docente, basándose en un fundamento científico con argumentos certeros que garanticen una aplicación reflexiva de sus conocimientos pedagógicos. Lo fundamental no solo es saber y saber hacer; sino, también, valorar, sentir, expresar, reflexionar y crear, porque la vida en las aulas es diferente cada día. Esto requiere de docentes verdaderamente preparados para un ejercicio reflexivo de su profesión en atención a la diversidad escolar.
¿Cómo lograr esto?
Se necesita plantear sistemas de formación continua en la labor docente. En el ámbito público, se debe garantizar un ejercicio que responda a la dinámica de los cambios de la sociedad. Que haya en los profesores un espíritu permanente de innovación. El objetivo no debería ser lograr solo un titulo o una plaza; sino, lograr la calidad en el continuo ejercicio docente; por ello, es muy importante el cambio de actitud en los profesores.
¿Cuáles son las instituciones encargadas de llevar a cabo esas acciones?
El Ministerio de Educación por medio de programas de actualización y especialización docente, en alianzas con centros de formación superior, como las universidades. Pero hay que tener cuidado, porque se debe garantizar la calidad de los centros de formación superior encargados de las capacitaciones y actualizaciones, pues de esta manera se garantiza también la calidad de la formación de los docentes que irán a las aulas.
